Un bebé de 10 meses de nacido casi pierde la vida a manos de su madre en Iquitos, ya que lo ahorcó con un cable de teléfono cuando sostenía una fuerte discusión con su expareja. El lamentable hecho ocurrió en la calle 17 de octubre, en el asentamiento humano Nuevo Puncahan, sector Masusa. La progenitora fue identificada como Rubí Pisco, a quien la Policía Nacional del Perú logró detener.
Moisés Prada señala que esta joven de 23 años acudió hasta la quinta donde alquilaba un cuarto para querer acuchillarlo. Varios testigos indican que ella se encontraba en aparente estado de ebriedad y llegó con su bebé en brazos para reclamarme la pensión de alimentos.
Uno de los hombres que también alquilaba una habitación, escuchó el fuerte llanto del pequeño en la azotea del inmueble y no dudó en subir para saber lo que estaba pasando. En ese momento se da con la terrible escena de ver la madre estrangulándolo con un cable y es ahí donde rápidamente lo carga para pedir ayuda a los vecinos.
Mientras los demás llegaban, esta persona con lágrimas en los ojos le reclamó a Rubí por lo que había hecho con el indefenso niño. “Le dije que estaba por tomar una mala decisión”, mencionó. Sin embargo, ella no se quedó callada e intentó justificar su accionar contando lo siguiente: “Expreso que, durante la relación con el padre de su hijo, sufrió maltrato físico y tenía que esconderse”.