Un funcionario de la embajada de Indonesia en Perú, identificado como Leonardo Zetro Purba, de 40 años, fue asesinado a balazos frente a su residencia en la cuadra 3 de la avenida César Vallejo, en el distrito de Lince. Dos sujetos a bordo de una motocicleta lo interceptaron mientras se trasladaba en bicicleta y le dispararon en varias ocasiones.
Zetro, quien cumplía el cargo de joven canciller organizador en la embajada, fue trasladado de inmediato a la clínica Javier Prado, donde falleció a consecuencia de las heridas. Testigos indicaron que días antes se habían observado movimientos sospechosos de motocicletas cerca del edificio, y un trabajador de la embajada describió al funcionario como una persona tranquila y dedicada a su familia.
Tras el crimen, la Embajada de Indonesia solicitó investigaciones exhaustivas para esclarecer los hechos, anunció el inicio del proceso de repatriación de los restos y reforzó la seguridad de su personal e instalaciones. Paralelamente, la Fiscalía peruana inició una investigación preliminar para determinar las circunstancias del asesinato.
Desde Indonesia, el viceministro de Asuntos Exteriores, Armanatha Nasir, señaló que la presidenta Boluarte “se ha comprometido a realizar una investigación exhaustiva y a detener con prontitud a los responsables” del asesinato del diplomático indonesio.
El ministro del Interior, Carlos Malaver, calificó el hecho como un sicariato: “No se le ha sustraído nada, lo estuvieron esperando y los impactos de los proyectiles fueron a la cabeza. (…) No descartamos nada”. Añadió: “Hay eventos criminales que no se pueden evitar”.
